El estado físico de toda la plantilla rojiblanca es excelso. Las sensaciones de este inicio liguero no pueden ser mejores, erigidos en nombres como Marcos Llorente que puede ser uno de los jugadores más en forma de todo el campeonato. Siendo un fijo para el técnico argentino en el lateral derecho, ha demostrado que esa será su posición en este curso, algo que debe hacer ver a Nahuel Molina que debe mejorar sus prestaciones si quiere competir con el español por ese puesto.

La delantera también ha comenzado con buen pie este curso. En estos momentos, el Atlético de Madrid es el máximo goleador de toda la competición, y no solo eso, ha demostrado que puede generar muchas ocasiones que acerquen aumentar aún más ese botín. Es cierto que la adaptación de los recién llegados como Sorloth o Julián Álvarez está lejos de ser plena, pero con ritmo de partidos y semanas jugando con sus compañeros, es fácil que se integren a la perfección en el seno del organigrama de Diego Pablo Simeone.

Tampoco se debe pasar por alto el paso adelante que ha ofrecido Pablo Barrios en el eje de máquinas. El canterano del Atlético de Madrid ha sido un fijo en el once inicial en estos dos primeros partidos, y es muy probable que siga siendo así viendo su rendimiento y el gran equilibrio que ofrece al equipo desde su posición. Un hecho, que hace que la salida como cedido de Vermeeren esté más cerca rumbo al Leipzig. El jugador belga no termina de llenar el vaso de las expectativas que el “Cholo” Simeone tenía puestas en él, y es más que probable que pruebe suerte en otro equipo para adquirir mucho más rodaje. La duda surge sobre si volverá a vestir la camiseta del Atleti, o será un cambio de aires definitivo.

El tiempo dirá si el Atlético de Madrid materializa una temporada histórica, o por el contrario surge el lamento de lo que pudo haber sido y no fue. Solo el paso de los partidos y el tiempo lo dirá. Por el momento, los aficionados al Atleti están muy ilusionados viendo el nivel del equipo en estos dos primeros encuentros, y no quieren que pare la fiesta.