La campaña se dirige especialmente a las personas de 60 años o mayores y menores de 60 años que pertenezcan a grupos de riesgo: enfermos crónicos (cardiovasculares, respiratorios, diabéticos e inmunodeprimidos), personas que convivan con personas de riesgo o mayores, personal sanitario, mujeres embarazadas y a quienes trabajan en servicios públicos como bomberos y policías.
Ante los síntomas de la gripe, se debe acudir al Centro de Salud, y se recomienda que, salvo complicaciones, no es necesario acudir a los Servicios de Urgencias para evitar el colapso. En caso de haber contraído la enfermedad lo indicado es reposo durante unos días, tomar abundantes líquidos para evitar la deshidratación y tratar los síntomas con analgésicos y antitérmicos siempre bajo prescripción médica. No está indicado el tratamiento antibiótico al tratarse de una infección producida por virus.