Canal de Isabel II ha retirado este año más de 1.500 toneladas de residuos de su red de saneamiento, en los casi 300 aliviaderos que evitan contaminar los ríos tras episodios intensos de lluvia.
Cada año llegan a las estaciones de depuración de la región más de 30.000 toneladas de restos sólidos desechados incorrectamente.
Pueden causar serios daños en estas infraestructuras vitales para la salvaguarda de los ecosistemas acuáticos.