La infraestructura ha sido objeto de una intervención para garantizar la seguridad de los usuarios tras detectarse problemas estructurales en el hormigón del tablero.
Los trabajos, que han contado con un presupuesto de 1,5 millones de euros, han sido ejecutados por el Área de Obras y Equipamientos.
La estructura presentaba una reducción de la resistencia del hormigón, lo que había dado lugar a la aparición de una importante cantidad de fisuras longitudinales.
Las obras han incluido la impermeabilización de todo el tablero, la regeneración del hormigón y la implantación de un nuevo apoyo, entre otras actuaciones.
Los trabajos, ejecutados por el Área de Obras y Equipamientos, se pusieron en marcha después de que los servicios municipales de conservación de estructuras detectasen la existencia de problemas estructurales en el hormigón del tablero, lo que llevó a la necesidad de actuar de forma inmediata para prevenir su evolución y evitar que pudiese suponer un riesgo para los usuarios.
El puente, proyectado en 1989 y cedido por parte del Estado al Consistorio en 2004 junto a la M-30, tiene una longitud de 63,20 m y un ancho de 35,34 m. De forma trapezoidal, la estructura se configura con una losa continua de hormigón apoyada en una única pila y en los dos estribos.
La estructura presentaba una reducción de la resistencia del hormigón, lo que dio lugar a la aparición de una importante cantidad de fisuras longitudinales en la cara inferior del tablero. Por ello, ha sido necesaria su impermeabilización para evitar la entrada de agua y así detener la reacción química que degradaba el hormigón. Asimismo, el tablero presentaba deformaciones, por lo que se debía ejecutar un nuevo apoyo intermedio del puente.
Así pues, las obras de rehabilitación han comprendido la impermeabilización del tablero y sus laterales, la regeneración del hormigón, la implantación de un apoyo en el vano de mayor longitud, la instalación de un sistema de monitorización para el control de entrada en carga y la adecuación a normativa del sistema de contención de vehículos.
Las ocupaciones y fases de los trabajos, que ha contado con un presupuesto de 1,5 millones de euros, fueron consensuadas entre los servicios de Obras y Movilidad del Ayuntamiento, la Dirección General de Tráfico y la Demarcación de Carreteras del Estado en Madrid./