La retención de líquidos, también conocida como hinchazón, es un problema habitual para muchas mujeres durante el ciclo menstrual. Desde INTIMINA, compañía que ofrece la primera gama dedicada a cuidar todos los aspectos de la salud íntima femenina, han preparado una guía sobre cómo controlarla y evitar sus molestos síntomas (especialmente en verano).
Durante el ciclo menstrual pueden distinguirse varias fases: folicular, ovulación y lútea. Y es en estas fases, donde las variaciones en estrógeno y progesterona pueden provocar retención de líquidos en algunas mujeres. Además, esa hinchazón puede producir aumentos de peso y molestias.
Varios estudios han demostrado que tanto el estrógeno como la progesterona provocan la retención de líquido en el cuerpo. También afectan a la pérdida transcapilar de agua, es decir, más agua va a los tejidos blandos de tu cuerpo, haciendo que se hinchen (habitualmente pechos, tobillos, pies y dedos). Debido a que los niveles de ambas hormonas están en su pico durante la fase premenstrual y durante la ovulación, es durante esta fase cuando la retención de líquidos es más notable
La retención de líquidos durante la fase premenstrual es habitual en muchas mujeres debido a los cambios hormonales. Especialmente si tienen síndrome premenstrual, puede ser muy incómoda pero, comprendiendo la causa y tomando medidas en todas las fases del ciclo, pueden minimizar el impacto de esa retención de líquidos”, afirma Irene Aterido, sexóloga y experta en ciclo menstrual y colaboradora de INTIMINA.