Fatiga, dolor en o alrededor de los ojos, visión borrosa, dolor de cabeza, visión doble, mareos, lagrimeo y enrojecimiento de los ojos e incluso vómitos son algunos de los síntomas que ocasiona la fatiga visual. La astenopia, como se conoce a esta afección en términos médicos, se produce cuando el ojo responde al esfuerzo muscular excesivo de forma prolongada. Si tienes algunos de estos síntomas, te damos a continuación algunas pistas para que puedas detectar si se debe a un problema ocular.
¿Qué provoca la fatiga ocular?
La luz fría es una de las causas de esta afección. Tras su uso prologando puede causar fatiga visual, especialmente cuando se emplea en habitaciones con poca iluminación. Como consecuencia, es posible experimentar sequedad ocular, picazón y problemas para enfocar la vista. Pero no solo es esta la causa por el aumento de uso de tecnologías y su uso continuado de pantallas electrónicas o leer con a mucha o poca distancia también puede provocar el cansancio ocular.
¿Cómo prevenirla?
Lo primero de todo es necesario acudir, al menos una vez al año, al oftalmólogo para hacer una revisión rutinaria. Él será el encargado de revisarte la vista y confirmarte si tus síntomas se deben a la fatiga visual. Pero, independientemente de que no tengas aun ningún efecto, es conveniente que realices algunos sencillos cambios de hábitos para evitarlo o reducirlo si la ya padeces:
-Iluminación: La elección de las bombillas para iluminar nuestro entorno es esencial no solo para crear una atmósfera agradable, sino también para cuidar nuestra salud visual. Por ello los expertos recomiendan el uso de luz cálida, que es más suave y relajante, lo que ocasiona una menor fatiga visual y ayuda a reducir la tensión ocular.
- Descansos cada 20 minutos: Mientras realices tareas que requieran mucha concentración ocular es fundamental, especialmente cuando estás delante de un ordenador o móvil, seguir la regla de 20/20/20, es decir, después de 20 minutos enfocados en una pantalla o tarea cercana, descansa tu mirada durante 20 segundos, observando a 20 pies (6 metros) de distancia.
- Evitar el abuso de pantallas, especialmente en niños, ya que, a la larga, acabarán padeciendo astenopia.
- Posición adecuada frente a la pantalla: Se recomienda colocar la pantalla a 1,5 metros de distancia y a la altura de los ojos o ligeramente por debajo, aproximadamente 20 grados.
- Uso de lágrimas artificiales: Al humedecer y lubricar los ojos con este producto se pueden mejorar estos síntomas sin necesidad de tener patologías oculares.
- Parpadeos: Se recomienda realizar 10 parpadeos completos de manera consciente con cierta frecuencia.
-Filtro de pantalla: Intenta usar un protector para la pantalla e incluso, si vas a adquirir un nuevo ordenador debes de saber que hay monitores y dispositivos electrónicos que tienen una función llamada "filtro de luz azul" que tiene como objetivo disminuir la cantidad de luz azul que emite la pantalla. Ajustando el nivel de reducción de emisión de luz azul, los monitores con filtro de luz azul se adaptan a las preferencias del usuario o a las necesidades específicas de cada actividad. Con modos preestablecidos para diferentes usos, como juegos, lectura o trabajo, algunos monitores ajustan automáticamente la cantidad de luz azul según el modo seleccionado.