En la cancha también se encontraban otras ex_olímpicas como la capitana Cristina Blanco y Sidorella Bracic.
Durante el desarrollo del WXV3, disputado en Dubái a lo largo de las últimas semanas, la Selección Española mantuvo una impresionante racha de victorias, gracias a una sólida actuación, que les permitió imponerse a Madagascar, Holanda y Fiyi, los tres rivales de su grupo. Este éxito refleja, no solo la calidad técnica de las jugadoras, sino también su mentalidad ganadora, y su capacidad para manejar la presión en el escenario internacional.
El logro de estas dos jugadoras subraya el crecimiento del rugby femenino y la importancia de seguir impulsando el desarrollo de este deporte a nivel local, contribuyendo así al éxito en los torneos de mayor prestigio y llevando el nombre de Pozuelo a lo más alto a nivel mundial, siguiendo la estela que marcaron otras jugadoras del Olímpico que ya consiguieron antes la clasificación y jugaron mundiales como Isabel Rico, Patricia García, Ana María Aigneren, Irene Schiavon, Sabina Hurtado, Iera Echebarría, Elena Redondo, Isabel Macías, María Ahis, Bárbara García... entre otras.