"El tratamiento del cáncer ha evolucionado significativamente en los últimos años, junto con la cirugía, la radioterapia y las quimioterapias "clásicas", los oncólogos en la actualidad tienen nuevos medicamentos de alto rendimiento, enfocados en la multiplicación de células cancerosas, vascularización de tumores o inmunidad antitumoral. Estas innovaciones terapéuticas tienen un gran impacto en el pronóstico de la enfermedad y en la calidad de vida de los pacientes. Sin embargo, este aumento de eficacia puede tener efectos adversos que muchas veces afectan a la piel: deshidratación intensa, inflamación y dolor en las áreas de soporte, grietas, fisuras, erupciones acneiformes son las manifestaciones más frecuentes. Este cuidado de apoyo se basa en la utilización de productos dermocosméticos con un requisito de calidad muy exigente. Combinados con una buena recomendación y con pautas de cuidado de la piel, se han convertido en el complemento esencial para continuar el tratamiento oncológico con la mejor calidad de vida posible" declara Dr. Didier Guerrero, consultor dermatológico de los Laboratorios Dermatológicos Avène.