El trágico suceso tuvo lugar en un centro privado, donde la niña, de sólo 16 meses de edad, falleció tras padecer un episodio de asfixia mientras se encontraba en la escuela.
La pequeña murió al quedar su cabeza atrapada entre unos barrotes blancos de madera que bordean la piscina del centro, situado en el paseo de la Ermita de Aravaca.
Hasta el lugar acudió una ambulancia del Summa-112, que encontró a la niña rodeada de cuidadores en parada cardiorrespiratoria y situación crítica. Mientras le practicaban maniobras de reanimación le trasladaron a las Urgencias de la Fundación Jiménez Díaz.
La menor no logró recuperarse y falleció este fin de semana. Agentes del distrito de Moncloa-Aravaca y de la Unidad Adscrita a los Juzgados de la Policía Nacional han pasado este lunes por el centro para tomar declaraciones a sus responsables, ya que un juez ha abierto diligencias por lo ocurrido.